Todos las personas necesitamos ahorrar para comprar algo o acceder a algún tipo de experiencia que queremos vivir.
Sin embargo, ahorrar a veces no es tan fácil.
Cuando no ordenamos nuestras finanzas personales, alcanzar una meta de ahorro puede ponerse cuesta arriba. Pero esto no quiere decir que no puedas tomar acciones que te encaminen hacia este objetivo.
La buena noticia es que si eres disciplinado, específico, constante y –sobre todo– buscas las condiciones para ahorrar más, es perfectamente posible.
Si buscas saber cómo armar un plan de ahorro o formas de ahorrar más dinero, sigue leyendo para conocer estas 6 formas para lograrlo este año.
1. Ponte una meta
Está estudiado que las personas exitosas tienen un “por qué” que las motiva y empuja a lograr un objetivo.
Ahora bien, a la hora de definir una meta u objetivo este debe ser específico, medible, alcanzable, relevante y dentro de un plazo específico.
Esto es lo que se conoce como meta SMART –por su sigla en inglés– una herramienta muy usada en administración de negocios.
Aquí tienes dos ejemplos:
a. Pagar 50% de mi deuda en 2020.
b. Ahorrar $2.000.000 en seis meses para financiar mis vacaciones a fin de año.
La meta depende de tu situación personal. Lo importante es que sea lo más tangible posible, de forma tal de ir midiendo tu avance.
2. Conoce tu situación financiera
Si tienes miedo de revisar tu estado de cuenta corriente, tienes un gran problema.
Saber dónde estás es el primer paso para avanzar. De hecho, identificar tu dolor de cabeza sirve para definir la meta que analizamos en el primer punto.
¿Cómo saber cuál es mi situación financiera? Muy simple: Revisa el balance de tus cuentas de ahorro, corriente e instrumentos financieros y compara el total con el dinero que debes en tarjetas de crédito, préstamos, etc.
No olvides considerar también tu nivel de gastos: arriendo o dividendo, gastos en cuentas, servicios, etc. Es decir, todo lo que gastas para vivir normalmente. Dicho de otro modo, cuánto te cuesta vivir.
Compara tu costo total de vida con tus ingresos totales. La diferencia es tu espacio de maniobra. Idealmente terminarás el mes con un pequeño saldo que puedes destinar al ahorro y el cumplimiento de tu meta SMART.
Si buscas cómo ordenar tus gastos, revisa este blog sobre 6 gastos personales que puedes eliminar.
3. Busca formas de facilitar el ahorro
Si volvemos a tu meta SMART de ahorro, la primera es definir tu objetivo mensual. Una alternativa es aplicando este formato: “ahorrar $50.000 al mes,” es un ejemplo que cumple con todos los criterios.
Ahora bien, básicamente dos formas de hacer esto:
a. Ahorra primero
Los expertos en finanzas personales recomiendan poner la cantidad que deseas ahorrar al mes en una cuenta de ahorro, APV o fondo mutuo, por ejemplo, apenas recibas tu sueldo.
Solo asegúrate de que sea un instrumento que permita hacer giros o retirar dinero sin mayores complicaciones.
La ventaja de este método es que, si lo transformas en un hábito, te acostumbras con relativa rapidez a vivir con un poco menos.
Y para aumentar tus posibilidades de éxito, usa PAC o Pago Automático en Cuenta Corriente. De esta manera, te olvidas de hacer el descuento y mover el dinero en forma manual.
b. Ahorra “al revés”.
Algunas veces funciona partir desde tu meta SMART. Supongamos que quieres tener $2.500.000 para emergencias o gastos inesperados al cabo de dos años.
Si ganas $1.000.000 al mes y destinas 10% –más o menos: exactamente $104.333– cada mes para cumplir esta meta, la cumplirás sin problemas en el plazo estipulado.
Aquí volvemos a las metas SMART. Esto es clave, de lo contrario aumentas las posibilidades de frustrarte y rendirte. Es por esta razón que es importante tener la película clara en cuanto a tus hábitos de gasto.
4. Registra cada uno de tus gastos
Esto se relaciona con el segundo punto. Registrar cada uno de tus gastos es la única forma de identificar las goteras por donde se va el dinero.
Una buena idea para hacer esto es destinar un poco de tiempo cada semana para el manejo de tu dinero. Lo mejor es tener una planilla para registrar cada gasto que haces.
De esta manera podrás hacerte una idea de qué gastos eliminar o reducir. Descarga esta planilla gratis para organizar hasta el último peso de tu presupuesto.
5. Anticipa problemas financieros en el futuro
Aquí hablamos de manejar tus tarjetas de crédito con responsabilidad. Si no controlas su uso, puedes encontrarte con pagos inesperados que afectarán tu plan de ahorro.
Una buena política es no usarlas y comprar algo con un solo pago. Si no puedes hacer esto, tienes que encontrar la forma de que tu gasto con tarjetas de crédito no supere 40% de tus ingresos mensuales, según reporta Emol.
6. Date un gusto –pero no abuses
Si conoces a alguien que tiene muy buena figura, seguramente te dirá que cuida mucho su alimentación. Pero es muy probable que agregue esto: “los domingos me permito darme un gustito”.
Hacer esto reduce la carga psicológica de estar a dieta. Lo hace más llevadero.
Lo mismo sucede con tu “dieta financiera”. Sin embargo, este gustito debe calzar dentro de tu presupuesto.
Por ejemplo, si logras una meta semanal o mensual que te pone en camino a lograr un objetivo financiero más grande, felicítate con algo que no dispare tu gasto y te recuerde lo bien que se siente lograr una meta de ahorro.
Mientras no te vuelvas loc@, es perfectamente posible ahorrar y disfrutar cada cierto tiempo. Te darás cuenta de que al ordenar tus gastos, puedes ahorrar más y destinar dinero a darte gustos cada cierto tiempo.
Dale una oportunidad al ahorro
Como puedes ver, hay cosas concretas y fáciles que puedes hacer si buscas cómo armar un plan de ahorro.
Te invitamos a ponerlas en práctica, el resultado puede sorprenderte.
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