Consejos para hacer rendir tu presupuesto en Fiestas Patrias

Con o sin aguinaldo, aprende a sacarle el máximo provecho a tu presupuesto. Para que el aumento generalizado de precios no amenace tu celebración dieciochera.

Si ya tienes planificadas tus vacaciones de Fiestas Patrias y te encuentras cotizando las cosas que vas a necesitar para cada una de las instancias de celebración, entonces estás en buen pie para hacer rendir aún más tu presupuesto.

Con o sin aguinaldo, y ojalá sin tener que recurrir a algún crédito o préstamo, la idea es que te asegures una buena celebración junto a tu familia y los amigos.

Antes de pasar a los siguientes tips, recuerda que los contagios por Covid-19 siguen en torno a los mil casos diarios promedio, por lo que no bajes la guardia y respeta las normas sanitarias de los lugares donde estés planeado ir.

¿Qué hacer si cuentas con un monto acotado de dinero?

Haz de la cocina un panorama en sí mismo

Hacer las cosas con planificación no sólo sirve para ahorrar dinero, sino que también para llevar a cabo actividades que nunca imaginaste el potencial que tenían. Por ejemplo, hacer empanadas.

Sobre todo si el dinero con que cuentas es acotado, para preparar empanadas en casa basta con comprar los insumos como la harina y el relleno que elijas, sumar un trago acorde para ti y tus amigos más sibaritas.

Considera que el precio de la carne es uno de los que más sube en estas fechas, por lo mismo, quizás sea una buena opción elegir vegetales para armar el relleno. Además, te resultará más sano y diverso.

Divide los gastos

Aunque tu casa sea la sede de uno o más eventos dieciocheros, eso no significa que seas tú quien debe asumir todos los gastos. Por el contrario. Preocúpate de definir quién aportará o financiará cada cosa antes de entregar las coordenadas de la celebración.

Puede resultar incómodo, pero sin duda te quitará el peso de tener que andar cobrando dinero a tus amigos después del evento. Además, si hacen un fondo común para las fiestas, tú y tus amigos o familiares pueden adquirir mejores precios por volúmenes de compra.

Pero lo mejor es que, entre todos los involucrados, se ayudan para que nadie pague más de la cuenta y alcance para todos.

Gasta conscientemente

Una vez tienes lista la planificación de tus celebraciones y cotizas cada uno de los productos que vas a necesitar, entonces llega la hora de salir a comprar y lo mejor es que lo hagas de manera consciente.

Por ejemplo, no es necesario que hagas asado todos los días ni que pagues entradas a las fondas de moda. Menos que gastes por gastar a la hora de las compras, echando por la borda toda la planificación de los días previos.

Aprovecha los panoramas gratis

Lo gratuito no es malo, sobre todo con las posibilidades que existen hoy, donde con solo poner algunos términos en el buscador, te enteras de una infinidad de actividades que antes simplemente no podías ni siquiera agendar.

Desde ramadas hasta presentaciones musicales donde solo piden un aporte voluntario; actualmente no solo existen sitios enfocados 100% en panoramas gratis, sino que también están las redes sociales de distintas organizaciones folclóricas o tradicionales que te mostrarán todas sus actividades.

Usa tarjetas para acumular puntos

Hoy son cada vez más las instituciones que cuentan con planes de fidelización para incentivar el uso de sus medios de pago y, en este sentido, es súper beneficioso hacerlo pues muchas veces se termina ahorrando dinero, junto con acceder a mejores precios y acumular puntos para futuras compras.

Disfruta de lo simple

Puedes encumbrar un volantín, bailar cueca y practicar juegos típicos gastando lo menos.

Ahora bien, en caso que no te gusten este tipo de actividades, lo mejor es que aproveches los días festivos para descansar y/o hacer panoramas que en otra época del año no puedes, como por ejemplo trekking u otras actividades al aire libre.

Finalmente, celebra con moderación

Siempre habrá otras instancias de celebración si es que hoy no cuentas con el respaldo económico para hacerlo a lo grande o como te gustaría. De todos modos, esto no significa que debas dejar de festejar, sino que tendrás que hacerlo de forma más planificada y consciente, lo que no es en absoluto malo.