¿Es posible ahorrar a fin de año? ¡Entérate cómo hacerlo aquí!

Nunca es demasiado tarde para empezar a guardar dinero. Si no partiste bien el año en materia económica, pero te fuiste ordenando con el paso del tiempo, perfectamente puedes comenzar a ahorrar ahora.

Sabemos que el inicio de año es un momento en el que las personas están mucho más dispuestas a proponerse -y cumplir- objetivos tales como hacer ejercicio, perder peso, comer saludablemente e incluso salir de deudas y guardar dinero. Por lo mismo es que es tan recomendable comenzar a ahorrar en este lapso de tiempo.

Pero nunca es demasiado tarde para empezar este hábito financiero, por lo que si no partiste bien el año en materia económica, pero te fuiste ordenando con el paso de los meses, perfectamente puedes comenzar a ahorrar dinero ahora.

Si piensas que esto es imposible debido a los numerosos gastos extra que representa el fin de año para ti, no te culpamos. Quizás puedes programarte mejor para el próximo. De todos modos, te haría bien manejar la siguiente información.

1. Reutiliza todo lo que puedas

¿Por qué seguir comprando cosas nuevas cuando las celebraciones de fin de año son iguales todos los años? Ya es hora de que cambies de mentalidad, por el bien del planeta pero también el de tu bolsillo.

Y con esto no sólo nos referimos a reutilizar los adornos del árbol de pascua, las luces y decoraciones, sino que también los papeles de envoltorio e incluso los regalos que te llegaron y definitivamente no vas a utilizar: seguro que hay alguien que lo va a valorar.

¿Tienes un libro sellado o productos que recibiste en la Navidad pasada en buen estado? Regálalos y podrás ahorrarte entre $10.000 y $25.000 únicamente por el hecho de comenzar a desprenderte.

2. Elabora un presupuesto

Te lo hemos dicho anteriormente y lo volvemos a repetir: cuando te enfrentas a los gastos con tiempo, no sólo tiene mejores perspectivas de ahorro, sino que también eres capaz de disfrutar mucho más.

Para definir este presupuesto, lo primero que debes aclarar son los ingresos que recibirás en estas fechas y, a su vez, descontar todos los gastos fijos. Este simple cálculo determinará el monto que podrías destinar a cubrir gastos extra. 

Para que esta operación sea lo más certera posible, no olvides considerar ítems como deudas que debas empezar a pagar a partir del último trimestre, gastos adicionales relacionados con Navidad y Año Nuevo, e incluso costos asociados a las vacaciones de verano.

Parte fundamental de este punto es llevar un control de lo gastado. De nada sirve que fijes un presupuesto si no lo respetas. Para que no te lleves sorpresas, lo mejor es anotar todo en una planilla, de esta manera estarás consciente del monto que te queda disponible.

3. Si tienes que comprar, hazlo de forma inteligente.

Como señala este artículo de Fintonic, una vez sepas bien qué gastos se pueden posponer, cuáles eliminar o reducir, llega inevitablemente la hora de comprar. Sin embargo, si se hace de forma inteligente, se puede ahorrar.

Para esto tienes que elegir qué comprar, qué no comprar y en qué lugares. Buscar ofertas, comparar precios y empezar por adquirir sólo lo realmente necesario, al menos hasta que te vayas reponiendo del desembolso navideño. 

En este punto es clave realizar las compras con tiempo. De hecho, si por ejemplo haces las compras navideñas antes del inicio de la temporada, evitarás pagar de más por un producto, puesto que todavía su demanda es baja.

4. No gastes todo tu aguinaldo

Así como hay un montón de gastos, fin de año también es una época de ingresos extra, como por ejemplo los aguinaldos o premios por desempeño en las empresas. En este sentido, es clave poder administrarlos de forma correcta y no gastarlos sin planificación.

Dale prioridad a los pendientes como las deudas y los seguros, o invierte en productos financieros acorde a los montos recibidos. Y si ninguna de las opciones entregadas te convence, siempre puedes ahorrar.

Tu mejor regalo de Navidad

Cuando empiezas a pensar en el mediano y en el largo plazo, disfrutas mucho más. Esto no significa que lo pases bien hoy, sino que lo empieces a hacer de manera diferente. Y es que el fin de año también es un período de reflexión y evaluación, donde puedes regalarte un estilo de vida más consciente y feliz, financieramente hablando.