Seguramente sabes que tener solvencia económica contribuye en gran medida al cumplimiento de las metas que te propusiste para este y los próximos años, así que si por ahora tus finanzas personales no se encuentran tan estables como te gustaría, es momento de que pongas en práctica nuevos hábitos de ahorro.
Si bien el ahorrar puede parecer un sacrificio, pues actualmente la mitad de los ahorrantes en Chile posee menos del 10% de un ingreso mínimo mensual como stock de ahorro, según el Informe de Ahorro a Plazo en el Sistema Financiero, en realidad es una oportunidad que, en el mediano y largo plazo, no solo te ayuda a salir de apuros económicos sino también a materializar tus sueños, por ejemplo: comprar una casa, continuar tu formación profesional, viajar a otro país, iniciar un negocio, etc.
En este sentido, es clave que comiences a implementar estrategias que te permitan, poco a poco, acumular dinero para alcanzar tus metas, tal y como las que te presentamos a continuación:
Reglas de ahorro financiero
Antes de poner en marcha cualquiera de estas reglas, ten presente tu situación económica actual, es decir, se consciente de cuáles son tus ingresos y gastos reales para que a partir de esto, manejes mejor el dinero que destinarás al ahorro, incluso durante una crisis financiera.
Una vez hecho esto será momento de que apliques las reglas básicas de ahorro. En seguida te dejamos un resumen de las que recomiendan los especialistas de Entrepreneur, Mi Bolsillo y La Tercera:
1. Define un objetivo
Ahorra con un fin determinado. Lo aconsejable es que inicies con metas a corto plazo (entre tres y seis meses), para que los beneficios que alcances refuercen tus hábitos. Tras esto, intenta con otras de mediano plazo (uno a tres años) y finalmente, con las que te llevarán más tiempo.
Para cada objetivo define, de la forma más realista posible:
- ¿Qué quiero?
- ¿En cuánto tiempo?
- ¿Cuánto debo destinar al mes para reunir la cantidad final?
2. Ahorra una cantidad fija cada mes
Pensar en guardar "lo que sobre" para el ahorro es un error, sobre todo porque la mayoría de las veces no hay sobrante. Por esto es fundamental que al distribuir tus ingresos destines una cantidad fija a este fin, así como los haces con el pago de los servicios y además, seas constante, es decir, que no pases ni un mes sin ahorrar.
3. Incrementa el ahorro, no el gasto
Es común que mientras más dinero se tenga disponible, más se gaste, por ello debe cambiarse el chip. Si en dado momento te topas con una situación así, lo más conveniente será que, gran parte o la totalidad de ese dinero extra, se dirija al ahorro y no a otros gastos, así mayor será el monto que acumules y alcanzarás tus metas más rápido.
4. Deja atrás los gastos innecesarios
Antes de comprar algo nuevo, vale la pena que te preguntes si en verdad lo necesitas, pues con tu respuesta sabrás si estás por incurrir en un gasto innecesario. Es vital… ¿renovar tus muebles?, ¿comprar nueva ropa?, ¿cambiar tus cortinas? Piensa detenidamente antes de tomar tu decisión y en caso de que sí sea muy necesario, busca opciones baratas para ello.
5. Compara precios
¿Te has preguntado si existen alternativas más económicas respecto a los servicios que usas o productos que consumes? Si la respuesta es no, entonces es conveniente que lo empieces a hacer.
Si contratas un servicio de streaming, por ejemplo, elige un paquete barato con la menor cantidad de pantallas para bajar costos; no vale la pena pagar mucho si solo ves 2 películas al mes.
6. Mentalízate en ahorrar
Si quieres concretar tus planes, de ahora en adelante tienes que hacer un uso más inteligente de tu dinero, y para ello puedes poner en práctica la regla del 50/20/30, la técnica de oro para ahorrar de por vida que consiste en distribuir tus recursos de esta manera:
- El 50% para tus necesidades básicas y deudas.
- Limita tus deseos al 30%.
- Destina el 20% para ahorros y pagos de deudas extra.
7. Planifica compras esenciales como las del supermercado
Revisa qué es lo que falta en casa, anótalo en una lista y apégate ciegamente a ella mientras recorres el supermercado y llenas tu carrito en los pasillos. También, haz un menú semanal con lo que comerás para que no te falte nada y evites comprar comida a domicilio, y aprovecha los días de ofertas, descuentos y rebajas.
8. Separa el dinero
Para evitar que tu ahorro desaparezca de la noche a la mañana es recomendable que abras una cuenta en la entidad financiera de tu preferencia, así mantendrás escondido ese dinero y evitarás caer en la tentación de gastarlo. No podrás acceder a él tan fácil y por lo tanto, reducirás las posibilidades de usarlo para cosas que no tengan nada que ver con tus metas.
¡No te desvíes del camino!
Si tienes la intención de comenzar a ahorrar para lograr tus metas, deja de pensarlo tanto y ¡pasa a la acción! Ahora ya sabes qué hacer para empezar y mantenerte en el camino correcto hacia tu objetivos.
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