¿Estás evaluando empezar un negocio y no sabes cuál personalidad adoptar? Si no sabes cómo decidir, te recomendamos pensar en tu bolsillo.
La personalidad jurídica en Chile permite a los individuos conformar una sociedad sin necesidad de comprometer su patrimonio personal.
Literalmente, al constituir una empresa como persona jurídica, estás separando las aguas entre las finanzas personales y las del negocio. Esto permite una mejor organización contable y evitar embargos de propiedad que no sea de la empresa en caso de mora, quiebras u otras causas judiciales.
Asimismo, la sociedad comercial ofrece la posibilidad de contar con mayor capital inicial, puesto que normalmente la conforman más de un socio; las empresas civiles de personalidad natural normalmente funcionan con máximo dos socios.
Según explica la iniciativa de fomento Empresarios en Red, las ventajas de constituir sociedad como persona jurídica incluyen:
Estos son los formatos de sociedad comercial disponibles:
Es una de las formas societarias más antiguas del mundo (herencia de la Edad Media). Las Entre sus principales características están:
Es el formato con personalidad jurídica favorito de Pymes y Mipymes, según la última encuesta Longitudinal de Empresas del Ministerio de Economía (Agosto 2017), por su flexibilidad y porque hay diferencias entre los socios.
Entre sus principales características están:
Es una estructura societaria algo más compleja, ya que porque los socios pueden ser activos (administrar) y/o pasivos (sólo aportar capital); los segundos se llaman comanditarios. Es también una sociedad que puede emitir acciones.
Principales características:
Es el cuarto tipo de empresa preferido por las Pymes, y la primera opción de grandes empresas. Esto se debe a que los derechos de los socios están representados por acciones, no mediante el capital inicial aportado. Y su administración responde a un Directorio y a una Junta de Accionistas.
Por ende, para una micro, pequeña y mediana empresa, este formato le queda “algo grande”.
El tipo de sociedad comercial conviene dependiendo del negocio y nivel de ingresos de la Pyme, del número de socios propietarios, y proyecciones de desarrollo y evolución.
Por ende, infórmate bien sobre sus diferencias antes de evaluar constituir este tipo de empresas, para que tomes una decisión acertada.